La principal diferencia entre las variedades sativas y las variedades índicas radica en su morfología. Mientras que las sativas son plantas muy altas que puede superar fácilmente los 2,5 metros de altura, las índicas tiene un porte más achaparrado. Además, las sativas tienen hojas de folíolos largos y delgados y, las índicas, anchos y cortos.
Asimismo, también hay quien dice que se diferencian en el efecto que producen, atribuyendo a las sativas capacidad estimulante y, las índicas, sedante. Sin embargo, esto es algo que aún se está investigando.
Estos dos tipos de cannabis, índica y sativa, representan dos vertientes distintas de la planta, cada una con su propia historia, apariencia, aroma, efectos y usos únicos. El debate sobre sus diferencias ha sido objeto de innumerables discusiones a lo largo del tiempo. Algunos afirman que la distinción entre ellas es clara y directa, mientras que otros argumentan que la realidad es mucho más compleja de lo que parece a simple vista.
Tipos de cannabis: historia y características
La primera persona que describió el cannabis como especie vegetal y sus características fue Carlo Linneo, a quien se considera el padre de la taxonomía moderna (ciencia que clasifica a los seres vivos). El científico sueco tan solo conocía el cannabis europeo, al que bautizó con el nombre de Cannabis sativa Linnaeus.
Sin embargo, pocos años más tarde, Lamarck, a quien también se le considera un referente en el ámbito por formular la primera teoría de la evolución, creyó oportuno diferenciar al cannabis de la India como otra subespecie distinta: Cannabis Indica. Esto era debido a sus diferencias con el europeo, principalmente.
Esta clasificación permaneció por más de 100 años, hasta que Dmitri Yanishevksi, ya en el siglo XX, propuso como subespecie a la Cannabis ruderalis Yanish. Este tipo de cannabis se caracteriza por no depender del número de horas de luz solar para florecer y por tener una altura inferior a 1 metro.
Por sí solas, las plantas ruderalis no se usan para nada, pero sí se han cruzado con índicas y sativas para crear híbridos que no dependan de la cantidad de horas de luz para florecer. Asimismo, también se han producido híbridos ricos en CBD con capacidad de autofloración.
Cannabis Indica vs. cannabis sativa
Tal como se explica en párrafos anteriores, Lamarck bautizó como Cannabis Indica a las plantas de cannabis procedentes del continente asiático. Las índicas, a diferencia de las sativas, se caracterizan por tener un porte achaparrado, dado que no alcanzan gran altura.
La Cannabis Indica, se ha utilizado durante cientos de años para la producción floral, dado que, originalmente, tenía propiedades embriagantes. Por tanto, a lo largo del tiempo, se han ido seleccionando las plantas con las mejores flores.
Por otra parte, las sativas, originalmente, eran las plantas de cáñamo europeo. Se trataba de un tipo de cannabis que se cultivaba para usos industriales, como la producción de ropa, cuerdas, papel, semillas, etc.
Las plantas sativas tienen una morfología diferenciada de las índicas: aparte de alcanzar gran altura, arrojan flores aireadas y poco compactas. Asimismo, sus hojas cuentan con folíolos estrechos y delgados.
Con el tiempo, los términos sativa e índica se han aplicado a la marihuana, llamando sativa a las variedades altas de folíolos largos y cogollos aireados e índicas, a las variedades achaparradas de cogollos prietos.
Con la actual popularización del CBD, estos términos también se han empezado a aplicar a las flores CBD. De manera, que las variedades parecidas a las índicas se llaman así y, a las más similares a las sativas, también se les llama sativas.
¿Cuáles son las sativas con CBD más populares?
Una de las sativas más mítica de las últimas décadas es la Amnesia, de la cual también existe la versión CBD. Se trata de unas flores con aromas cítricos y frutales, muy característicos de las variedades sativas.
Otra planta sativa muy popular es la Cheese, cuyo origen se remonta a finales de los 80. Se dice que esta variedad mítica fue creada por el mismísimo Sam The Skunkman, un conocido criador de cannabis que actualmente trabaja en la industria farmacéutica.
Las plantas de la familia Cheese son variedades con matices complejos que, como su propio nombre indica, cuentan con aromas similares a los del queso. La versión CBD de esta planta tan mítica se encuentra en nuestro catálogo con el nombre de Royal Cheese.
¿Cuáles son las índicas con CBD más populares?
En cuanto a las índicas, una de las más populares es la California Orange, una variedad desarrollada durante los 70. Esta genética destaca por su aroma cítrico y sus pistilos anaranjados. Como no, la versión CBD de esta variedad se encuentra también en nuestro catálogo, bajo el nombre de Cali Orange CBD.
Otra variedad muy popular entre las índicas es la OG Kush, una variedad de los 90 que cautivó los stoners estadounidenses de finales de siglo y que a día de hoy sigue siendo muy popular. Las plantas de familia Kush tienen sus raíces genéticas en las variedades originarias de la cordillera del Hindu Kush, situada entre Afganistán y Pakistán. La versión CBD de esta planta legendaria también se encuentra en nuestro catálogo: la OG Kush CBD.
Para concluir, una de las variedades más populares de los últimos años es la Zkittlez. En 2015 ganó el primer puesto en las Cannabis Cup de San Francisco y Michigan, además del primer puesto en la Emerald Cup Help de 2016. La versión CBD de esta índica moderna se encuentra también en nuestro catálogo: la Zkittlez CBD.
Aunque miles de variedades sativas e índicas, estas son algunas de las más destacadas por su calidad y asombrosos aromas.
Finalmente, desde The Tree CBD te recordamos que las flores CBD se consideran un objeto de coleccionismo en España, por lo que cualquier uso distinto de esta finalidad constituye un mal empleo de producto.