Las resinas de CBD o resinas de cannabis sin THC, son extractos de flores cáñamo que contienen CBD en grandes concentraciones. Según el método de extracción o elaboración utilizado, hablaremos de hash, charas o polen. Estas extracciones son muy similares entre sí, variando ligeramente el aroma y aspecto.

Resinas con CBD

Las resinas con CBD, como extracto de flores de cáñamo, son totalmente naturales, ya que se obtienen por procedimientos mecánicos tradicionales. Es decir, se trata de un producto totalmente libre de cualquier tipo de químico nocivo, porque el único ingrediente que se utiliza para su producción son flores ricas en CBD.

Los métodos tradicionales de extracción de resina de cannabis han permanecido inalterables por cientos años. Recientemente, han surgido nuevas técnicas de extracción más industriales, aunque las antiguas se siguen manteniendo, ya que dan lugar a un excelente producto final. 

Las nuevas formas de cultivar cáñamo favorecen la producción de resina

Tradicionalmente, el cáñamo se cultivaba para la obtención de fibras y semillas, por lo que apenas se le daba importancia a las flores. No obstante, la popularización del CBD ha puesto en valor a los cogollos de cáñamo. Es precisamente en esta parte de la planta donde se produce la resina, que es rica en CBD.

Los cultivadores de marihuana, por otra parte, sí se ocupaban tradicionalmente de la obtención de flores de aroma pronunciado y con altos contenidos de cannabinoides. Cuando los beneficios del CBD comenzaron a popularizarse, surgió la necesidad de investigar nuevas formas de cultivar cáñamo.

Es decir, dado que ahora sí se necesitaba producir flores abundantemente, que además fuesen muy aromáticas y de altos contenidos de cannabinoides, el cultivo de cáñamo cambió para satisfacer esta necesidad.

Han sido muchos los breeders (criadores) y cultivadores que han trabajado la obtención de flores de cáñamo que sean parecidas a la marihuana tradicional en aroma y aspecto, pero con bajos niveles de THC y alto contenido de CBD.

Gracias a estas nuevas maneras de cultivar cáñamo, se pueden obtener resinas muy aromáticas y fragantes. Tanto el CBD como los terpenos, se producen en unas estructuras especializadas que se llaman tricomas glandulares. Estos se hallan mayormente en las flores de las plantas hembra de cannabis.

La cantidad de estos tricomas determinará el nivel de CBD y terpenos de una planta. Es decir, cuantas más glándulas productoras de resina tengan sus flores, mayor contenido de CBD tendrá y más aromática será.

Métodos de extracción de resina

Existen diversas formas de separar la resina de las flores. Principalmente, se pueden distinguir dos tipos de métodos de extracción: los mecánicos y los químicos. Los primeros se caracterizan por separar la resina mediante procedimientos que no alteran su composición original. Suelen consistir en golpear, frotar o enfriar las flores, de manera que los tricomas queden separados de estas.

Los segundos, en cambio, consisten en mezclar los cogollos con sustancias químicas capaces de disolver la resina. Una vez obtenida una disolución que contiene el CBD y los terpenos, estos se separan de manera que esas sustancias añadidas quedan eliminadas. 

Aunque ambas formas de obtener resina son muy efectivas, la segunda entraña algo más de peligro para los productores de resina, que frecuentemente trabajan con gases inflamables. Además, estos métodos deben llevarse a cabo correctamente para asegurar un producto libre de químicos nocivos.

¿Qué es el polen o hash extraído en seco con CBD?

El polen con CBD o hash seco es un tipo de extracción o resina de cannabis con alto contenido de CBD y muy rico en terpenos. Se trata de una especie de pasta de resina muy similar al hachís tradicional, con tonalidades más bien claras que van desde el amarillo al marrón, pasando por el verde en algunas ocasiones.

Se trata de un tipo de resina muy aromática, que se extrae en seco mediante un suave tamizado de las flores. Es decir, los cogollos de cáñamo ricos en CBD se sitúan sobre una malla de enrejado muy fino (se mide en micras) que se van moviendo para que las flores vibren y reciban ligeros golpecitos. El objetivo es que los tricomas pasen a través de estas mallas, pero no la materia vegetal, quedando así separada la resina de las flores.

Como ves, se trata de un método que no requiere ningún tipo de ingrediente extra porque la resina se separa de las flores mediante un tamiz, que la va filtrando lentamente. Tan solo con las flores de cáñamo, recibiendo el tratamiento adecuado, se obtiene esta pasta que se conoce como polen con CBD o dry hash con CBD. 

Como particularidades de este método, cabe destacar que las flores se secan antes de ser sometidas a este proceso. Además, a veces también se refrigeran antes en una nevera para favorecer la separación de los tricomas, ya que el frío favorece su desprendimiento.

¿Qué es el bubble hash o hash al agua con CBD?

El bubble hash o hachís al agua es un tipo de resina que se extrae mediante el uso de agua para separar la resina de la flor. La resina de cannabis no es hidrosoluble, es decir, no se disuelve en el agua. Por tanto, esta actúa como un separador mecánico al segregar los tricomas de la flor.

Tal como ocurre con el hachís extraído en seco, este tipo de resina se obtiene mediante el empleo de mallas que actúan como tamiz, impidiendo que la materia vegetal se mezcle con la resina.

Básicamente, varias mallas se disponen sobre un recipiente y se vierte sobre ellas una mezcla de agua, hielo y flores de cáñamo. El agua y la resina se filtran, de manera que el líquido queda recogido en el recipiente y la resina, entre las mallas, quedando las flores en la parte de arriba.

Posteriormente, se seca la resina y se prensa para formar una pasta aromática de color marrón oscuro, que será el resultado final. Para obtener hash con CBD de esta manera, suele ser necesario secar las flores previamente.

¿Qué es el charas con CBD?

Charas es el nombre que recibe el hachís que se elabora tradicionalmente en las zonas de India y Pakistán. Se caracteriza porque, a diferencia de los explicados anteriormente, se elabora con la planta en fresco, es decir, sin que las flores sigan un proceso de secado.

Tradicionalmente, el charas se elaboraba de forma manual, frotando los cogollos frescos con las manos hasta acumular una buena capa de resina. Actualmente, el charas con CBD se sigue haciendo así, de manera que se trata de una resina de excelente calidad obtenida a mano y de modo totalmente ecológico.

Al emplearse flores de cáñamo de la mejor calidad, muy aromáticas y con grandes cantidades de resina, el producto resultante conserva los sabores ancestrales de las mejores resinas de la India, Nepal y Pakistán.